La Rioja iniciará acciones judiciales contra el modelo minero de San Juan
El desarrollo del megaproyecto de cobre y oro Josemaría -ubicado en el noroeste de San Juan- se ha convertido en las últimas horas en “asunto de Estado” para La Rioja.
El gobierno de Ricardo Quintela tiene previsto, en el transcurso de esta semana, presentarse a audiencia pública –amplia y participativa- para dar a conocer su postura del proyecto de cobre que ejecuta San Juan de la mano de Sergio Uñac.
Los riojanos dejaron trascender ante la opinión pública que tienen decidido corregir “los atropellos” en los que ha caído el distrito minero predilecto del secretario de Minería de la Nación, Alberto Hensel.
Noticiasmineras.com supo por fuentes oficiales que en la anunciada audiencia pedirán que se resuelva en lo inmediato la “situación limítrofe controversial”, sucede que parte del yacimiento Josemaría se encuentra en suelo riojano, instancia desconocida por los pares de Hensel.
Otro de los aspectos que Quintela reclamará es la “implicancia ambiental en territorio riojano”, aspecto pasado por alto por las autoridades sanjuaninas constituyendo un llamativo yerro.
Como si estos factores no fuesen suficientes, el actual conflicto trajo viejos recuerdos que el pueblo riojano no olvida.
“El proyecto de oro, Gualcamayo, fue esquivo y una mala experiencia desde lo laboral”, aseguraron fuentes gubernamentales a esta agencia. Hay total convencimiento que existió una decisión política para que la proveeduría de servicios no sea compartida con las pymes riojanas.
En este escenario de tensiones, no se descarta que las comunidades de Guandacol y Chilecito articulen un mismo reclamo contra las autoridades políticas de San Juan.
Justicia
Asimismo, medios de comunicación riojanos dieron a conocer que el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, anunció públicamente que estudia avanzar en una presentación judicial para defender los recursos naturales de su territorio buscando poner claridad a un nuevo conflicto limítrofe con su vecina provincia.
«Pronto van a tener novedades de situaciones que están sucediendo en limites en la provincia, tenemos que actuar todos los riojanos en defensa de nuestros intereses», manifestó el mandatario.
Además, pidió que «no bajen los brazos, no pedimos que nos acompañen partidariamente, sino en alcanzar los objetivos que nos proponemos para que cada día la gente pueda vivir mejor».
Influencias
Las contradicciones que muestra el modelo minero sanjuanino lleva a hacerse una serie de planteos para comprender la realidad cuyana, y todos conducen a un mismo factor: Alberto Hensel.
Especialistas mineros recitan una y otra vez que –a la luz de los resultados- que el Secretario de Minería de la Nación utiliza su posicionamiento en detrimento del federalismo promoviendo ventajas corporativas sólo para su tierra natal. Error ya tratado en artículos anteriores.
Ése microclima de inversión permitió el grupo canadiense Lundin avanzar en el estudio de factibilidad económica del proyecto de cobre y oro Josemaría. La construcción demandará unos US$ 3.000 millones. En contraposición, resalta la inacción del funcionario nacional en el cierre de Minera Aguilar en la Provincia de Jujuy.
Otro de los aspectos observados, es la filosofía que comanda la práctica industrial de Alberto Hensel y sus pares. En la minería moderna, el ordenamiento industrial se transformó en la mejor licencia social que tiene que mostrar la actividad ante las comunidades para fomentar su crecimiento.
De hecho, Argentina adhirió a protocolos tendientes al cuidado del medio ambiente y el respeto por las comunidades. Una de esas iniciativas es el programa canadiense Hacia una Minería Sostenible (HMS), impulsado en el país por CAEM.
Sin embargo, la tierra natal del Secretario de Minería vuelve a caracterizarse por apartarse de las buenas prácticas al no respetar a la comunidad que habita suelo riojano, promoviendo mezquinamente su desarrollo. Es necesario cambiar “atropello” por “respeto”.
La práctica industrial promovida desde la tierra natal de Alberto Hensel no puede continuar con su derrotero, pues constituye un grave daño a la minería argentina en su conjunto al estar implicado quien tiene responsabilidad de generar las condiciones para el desarrollo y fomento minero de la República Argentina. Honestidad institucional es todo lo que se necesita.
Fuente; noticiasmineras.com