Exportaciones de las principales especies pesqueras
El informe elaborado por CAPECA da cuenta de la particular situación vivida en los mercados en este año marcado por la pandemia. La merluza hubbsi y el langostino entero fueron los productos más castigados pero las colas de langostino han mejorado y el calamar está teniendo un año excelente.
El informe de exportaciones que elabora Fabián Pettigrew para CAPECA muestra que en septiembre las exportaciones de los principales productos han tenido situaciones dispares dependiendo del tipo de producto del que se hable. La merluza hubbsi sufrió una fuerte baja al igual que el langostino entero, aunque las colas de langostino han experimentado un aumento en la demanda y el calamar superó ampliamente los índices de 2019. La merluza negra aumentó las exportaciones en volumen pero ante una fuerte caída del precio, registró una baja en divisas. Finalmente la centolla, otra de las especies que comercializan las empresas asociadas a esta cámara, ha disminuido sus ventas.

Para los filets de merluza hubbsi se ha registrado una baja en las ventas del orden del 17% en volumen y del 27% en dólares, dado que el precio promedio cayó en estos nueve meses del 2020 un 12% en comparación con el año pasado. Brasil, el principal comprador, requirió un 15% menos en volumen, lo que representó en dólares una baja del 26%; España, el segundo mercado en importancia, requirió este año un 13% menos en volumen y se recaudó un 22% menos, siendo el país que pagó el precio más bajo, a razón de 2.566 dólares la tonelada. Con volúmenes muy inferiores se ubica Estados Unidos como el tercer destino más importante; en este caso la reducción de la demanda en toneladas fue del 6% pero en recaudación implicó una reducción del 19%, dado que el precio cayó un 14% en comparación con 2019. En total, de este producto se exportaron 40.018 toneladas por casi 110 millones de dólares y el precio promedio se ubicó en 2.741 dólares.
La merluza, en otras presentaciones que excluyen el filet, también sufrió un baja pero de menor magnitud. En volumen cayó un 6% y en dólares un 14%, exportándose en total 26.735 toneladas por 38 millones de dólares. El precio promedio cayó un 8,4% ubicándose en 1.427 dólares la tonelada. Rusia, con 12 mil toneladas, es el principal comprador y a diferencia de lo que ha ocurrido con otros mercados, en este año de pandemia requirió un 22% más que en 2019. Ucrania fue el segundo mercado en importancia por volumen de demanda con 2.104 toneladas, pero por haber pagado uno de los valores más bajos se ubica en el cuarto lugar de la grilla, debajo de España y Macedonia.
En el caso del langostino, la situación es muy diferente para quienes comercializan el producto entero o en colas. Para el primer caso la baja en volumen de exportación fue del 43% y en recaudación del 48%; y si bien el precio promedio cayó un 8%, colocándose en 5.354 dólares la tonelada, en algunos casos cayó hasta un 31%. En España, el principal mercado de este producto, las ventas cayeron un 45% en volumen pasando de casi 32 mil toneladas en 2019 a poco más de 17 mil en 2020; y la recaudación cayó un 49%. China, que el año pasado ocupó el segundo lugar, este año pasó al cuarto: de 12 mil toneladas compradas en 2019 este año solo requirió 3.109, experimentando una caída del 74% en volumen y del 78% en divisas, porque en el gigante asiático, además, los precios cayeron un 16%. En 2020 el segundo lugar lo ocupó Italia, a pesar de haber requerido un 11% menos; y en tercer lugar Japón, que no solo mejoró su demanda respecto del año pasado sino que, al igual que Italia, mantuvo valores similares a los de 2019, aunque siempre por debajo de los 6 mil dólares.
En el caso de las colas de langostino la situación fue mucho más auspiciosa. China fue el principal comprador y con casi 14 mil toneladas requirió un 24% más que en 2019; en divisas el aumento fue del 9,5% porque las adquirió a un precio 11,5% menor al del año pasado. Perú, que el año pasado había ocupado el cuarto lugar, este año trepó al segundo. Con casi 7 mil toneladas aumentó su demanda en un 88% y en divisas un 70,5%, diferencia debida a la caída del precio en un 9%. España este año ocupó el tercer lugar, aunque pagando un mejor precio. En total se exportaron 44.562 toneladas por 320 millones de dólares, lo que representa una suba del 10% en volumen y del 1,8% en divisas. El valor promedio de las colas se ubicó en 7.181 dólares, casi un 8% por debajo de los valores promedio de 2019.
El calamar en su temporada récord vendió hasta el 30 de septiembre 142.909 toneladas por más de 380 millones de dólares, cifras que representan un 71% de aumento en volumen y un 83% en divisas, dado que estuvo acompañado por el alza del precio promedio de un 7% en comparación con 2019. El principal comprador fue China, que se llevó más de 74 mil toneladas por las que pagó 190 millones y medio de dólares. Estas cifras representan un aumento del 50% y del 65% respectivamente; el precio pagado no fue el más alto pero si un 10% superior al del año pasado. Corea del Sur este año ocupó el segundo lugar en la grilla de los principales mercados, aumentado su demanda un 235% y España con 11 mil toneladas fue desplazada al tercer puesto, a pesar de haber aumentado la demanda en un 50%. Por debajo se ubicó Tailandia, que a fuerza de una demanda 254% mayor trepó al cuarto lugar. El precio promedio se ubicó en 2.661 dólares la tonelada; el mejor precio lo pagó España a razón de 3.339 dólares la tonelada.
El principal producto de merluza negra que comercializa Argentina es la entera eviscerada y este año se ha exportado un 16% más que el año pasado en volumen pero se recaudó un 2% menos debido a una caída del precio del 16%. En total se vendieron 1.605 toneladas por 30 millones y medio de dólares a un precio promedio de 19 mil dólares la tonelada. El principal mercado de destino fue Estados Unidos que se llevó mil toneladas, aumentando su demanda en un 36% en comparación con el año pasado.
La centolla argentina, una especie relativamente nueva en el mercado, este año sufrió una baja del 16% tanto en volumen exportado como en recaudación, aunque puede deberse a las limitaciones que se han impuesto a las extracciones en la pesquería para garantizar la sustentabilidad. La buena noticia es que pese a ser un año muy complicado, Estados Unidos, su principal mercado, ha requerido un 13% más que el año pasado y China aumentó considerablemente su demanda. En total se vendieron 1.121 toneladas por 19 millones de dólares a un valor promedio de 17 mil dólares la tonelada.
Fuente: Revista Puerto